PALABRAS QUE MATAN O PALABRAS QUE DAN VIDA

22.04.2025

Proverbios 18:21 (RVR1960)
"La muerte y la vida están en poder de la lengua, y el que la ama comerá de sus frutos."

Dios es claro: TU LENGUA TIENE PODER DE VIDA O MUERTE. Cada palabra que sale de tu boca hacia tus hijos está sembrando vida o destrucción en su futuro.

Diagnóstico: Padres con Bocas Destructivas

"Nunca haces nada bien"... "Eres igualito a tu papá"... "Me tienes harta"... "No sirves para nada"...

¿Reconoces estas frases? Tal vez las escuchaste de niño, o peor aún... ¿las has dicho tú?

Hay padres que sin darse cuenta están destruyendo el futuro de sus hijos con sus propias palabras. Están profetizando fracaso, limitación y dolor sobre la vida de quienes más aman.

El resultado: Hijos que crecen creyendo las mentiras que sus propios padres declararon sobre ellos.

La Escritura nos Confronta

Proverbios 18:21 (RVR1960)
"La muerte y la vida están en poder de la lengua, y el que la ama comerá de sus frutos."

Dios es claro: TU LENGUA TIENE PODER DE VIDA O MUERTE. Cada palabra que sale de tu boca hacia tus hijos está sembrando vida o destrucción en su futuro.

¿Pero qué estás sembrando realmente? Cuando tu hijo comete un error, cuando te frustra, cuando no cumple tus expectativas... ¿qué sale de tu boca?

La pregunta incómoda: Si tus hijos fueran lo que tú has declarado sobre ellos, ¿estarías orgulloso del resultado?

Los Dos Puntos que Cambiarán tu Paternidad

1. TUS PALABRAS ESTÁN CREANDO EL FUTURO DE TUS HIJOS

No son "solo palabras". Son decretos proféticos que están moldeando la identidad de tus hijos.

Cuando dices: "Eres un irresponsable", no estás describiendo... estás creando. Cuando declaras: "Nunca vas a cambiar", estás atando su potencial.

La pregunta reflexiva: ¿Qué futuro has estado creando con tus palabras? ¿Tus hijos están viviendo las limitaciones que tú mismo les pusiste?

El problema: Muchos padres están más enfocados en corregir comportamientos que en formar identidad. Corrigen lo que ven, pero no declaran lo que Dios ve en sus hijos.

2. DIOS YA TIENE PALABRAS ESCRITAS SOBRE TUS HIJOS

Mientras tú te quejas de lo que son, Dios ya declaró lo que pueden llegar a ser. Él ve potencial donde tú ves problemas.

La verdad poderosa: Cuando alineas tus palabras con la Palabra de Dios, te conviertes en co-creador del destino de tus hijos.

La pregunta transformadora: ¿Qué pasaría si comenzaras a hablar sobre tus hijos de la misma manera que Dios habla sobre ellos?

¿Quién es Responsable de las Palabras Destructivas?

¿Es el comportamiento de tus hijos? ¿Es tu cansancio? ¿Es tu propia crianza?

No. Eres tú quien elige qué sale de tu boca.

Cristo te enfrenta a tu realidad: Estás usando tu lengua como arma de destrucción en lugar de como instrumento de bendición.

Al igual que la mujer afanada y turbada, estás reaccionando en lugar de responsar desde la verdad de Dios.

Ejemplos de Palabras Alineadas con Dios

En lugar de decir:

  • "Eres un desobediente"
  • "No tienes remedio"
  • "Eres torpe"
  • "Eres igual a..."

Declara la verdad de Dios:

  • "Dios te está enseñando obediencia"
  • "Eres hijo de Dios y tienes su naturaleza"
  • "Estás aprendiendo y creciendo en sabiduría"
  • "Eres único y especial para Dios"

¿Ves la diferencia? Una destruye, la otra construye. Una limita, la otra libera potencial.

El Desafío Práctico

Esta semana, vas a hacer un experimento:

  1. Declara una verdad bíblica sobre cada hijo cada mañana:
    • "Eres más que vencedor en Cristo"
    • "Dios tiene planes de bien para tu vida"
    • "Eres cabeza y no cola"
  2. Cuando vayas a corregir, primero afirma:
    • "Te amo y sé que puedes hacer mejor"
    • "Dios me dio un hijo sabio, ahora muéstramelo"
  3. Antes de dormir, bendícelos con palabras específicas:
    • "Mañana serás mejor que hoy"
    • "Dios te guarda y te protege"

¿Estás dispuesto a cambiar el futuro de tus hijos cambiando tus palabras?

Tu lenguaje necesita restauración

Deja de maltratarte con la excusa de "es que me sacan de quicio". Tu lengua es tu responsabilidad.

Comienza hoy un tiempo de restauración de tu manera de hablar sobre tus hijos.

Recuerda: Tus hijos no necesitan un padre perfecto, necesitan un padre que hable vida sobre ellos.

La Invitación de Cristo

¿Vas a seguir siendo el profeta de limitaciones de tus hijos, o vas a convertirte en el vocero de Dios en sus vidas?

Dios ya escribió palabras hermosas sobre cada uno de tus hijos. Tu trabajo es declararlas, no contradecirlas.

¿Qué va a salir de tu boca hoy?

La decisión es tuya: ¿Muerte o vida? ¿Limitación o bendición? ¿Frustración o esperanza?

Tus hijos están esperando escuchar la voz de Dios a través de ti.

Oración: "Señor, perdóname por las palabras destructivas que he hablado sobre mis hijos. Ayúdame a alinear mi boca con tu corazón. Que mis palabras sean vida, esperanza y bendición. Enséñame a hablar como Tú hablas sobre mis hijos. Amén."

Con Amor, 

¨Pastora y Terapeuta JANETTE CUEVAS DE CONTRERAS

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